Carta VI


Ha pasado tanto tiempo ya amigo, y te sigo necesitando y extrañando como el primer día.

 Siempre quise haber dicho algo que te haya ofendido, y ese sea el motivo para tu ausencia. Siempre supe que ya no estabas en esta tierra pero ... no quería perder la esperanza... esa esperanza de la que tanto me enseñaste, esa que me diste al conocerte. Ante la muerte no hay oportunidades y me negaba a ello.

Te escribí tantas cartas... contándote cosas como siempre, te llame una y mil veces marque tu número y nadie respondió… busque, tus llamadas, tus mails, tus lindas cartas …busque… espere y lloré.

Tanto tiempo después las lagrimas siguen brotando … hasta el cielo llora hoy, releo tus cartas y te traigo conmigo, te siento conmigo, cuidándome como siempre.

Y es porque te siento conmigo, aquí a mi lado, que te cuento las cosas que te cuento, que te pregunto como ayer las cosas que te pregunto. Que te confío mis secretos y daría cualquier cosa por escuchar los tuyos, una vez más.

Ay Amigo mío… cuando me veas recorrer tus prados, lagunas que juntos soñamos, cuando me veas adormecerme en el hastío de las salinas que rodearon tu hogar ... acompáñame! Y contempla conmigo la templanza del sol que insiste en doblegar el espíritu del roble y las acacias. Acompáñame! Y déjame contigo recorrer el camino que juntos debimos transitar.

Ay amigo mío tantos suspiros elevo a tu cielo, pidiéndote que cuando me veas vagar por la pampa, respirando ese aire de ti, recibiendo el sol que te tocaba, buscando el viento que se te escapó. Me acompañes,  en ese viaje que ambos debimos hacer. Acompáñame y seca las lagrimas que no me dejan ver claro el camino.
 
Y si me vez, perdida en la llanura, o quieta como rosa del desierto, sola ante el solo, no me arranques de mi dolor si no será con una caricia.
 
Y si me vez, abierta al viento, al sol y a la laguna que adorna tu lugar no me arranques de tu corazón, si no es con un suspiro.
 
Si me vez sentada en un risco mirando el cielo, buscando tus ojos, sintiendo tu voz, no distraigas mi pensar pues estaré buscando tu paz para volver a llenarme de ti.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Carta X

Carta IX